¿Cómo pueden hacer las pequeñas empresas hogareñas para crecer usando Facebook, LinkedIn o Twitter? ¿O acaso son éstas herramientas para ser aprovechadas por los comercios más bien?
Si bien estas tres redes sociales funcionan de forma bastante diferente, el resultado final es similar: más contactos y mayor exposición de tu actividad, lo cual incrementa las posibilidades de conseguir más clientes.
Para explicar cómo beneficiarnos de estas redes, primero debemos conocer sus características básicas, cuáles son las diferencias entre ellas y cómo funcionan.
Facebook ayuda a darle un «rostro» a aquellos que se conectan con vos, a conocerlos y que ellos te conozcan. Como decía en el post 5 básicos de la presencia web, podés crear una Página de fans (Fan Page). Allí podés comunicar distintas cosas. No te aconsejo que sea pura publicidad de tus servicios, claro que la finalidad es esa, que la gente se entere qué hacés y qué ofrecés, pero es una buena política matizar este fin de venta con noticias importantes relacionadas al servicio que brindás, novedades que tengan que ver con tu rubro, inclusive noticias buenas de “la competencia”, todo lo que ayude a que la gente no sienta que todo lo que le llega de tu fan page es una venta o promoción.
Algo que hay que tener siempre presente es que las redes sirven para comunicarse, para relacionarse como personas, no para tener potenciales clientes cautivos de tu discurso de venta. Recordá que se pueden borrar muy fácilmente de tu fan page tan pronto se sientan incómodos con tus publicaciones.
Si tenés un blog, la fan page es el lugar ideal para dar a conocer tus nuevos artículos. Insisto, también podés incorporar blogs de colegas, ya sea que tengas o no tu propio blog. Si no lo tenés, podés subir artículos de tus blogs favoritos, frases, noticias de algún nuevo software que puede interesar tanto a tus colegas como potenciales clientes, y claro de tanto en tanto te promocionás, ofrecés beneficios, etc.
Algo muy interesante de Facebook es que está basada en los permisos, esto significa que por el hecho de que los fans ya están conectados con vos, ya tenés su permiso para enviarles cosas (como por ejemplo invitaciones a eventos) vía Facebook.
LinkedIn es una red profesional, es más bien una red de negocios que social. En esta red uno puede invitar a su red supuestamente sólo a la gente que conoce. El tema es que cada vez que vos te conectás con alguien, ese alguien tiene más contactos para que puedas invitar a tu red, contactos de 2º y 3º grado. También podés unirte a grupos que tengan que ver con tu actividad y así poder contactarte con más personas a partir de esos grupos.
Dependiendo de lo que esos contactos no primarios hayan dispuesto como formas en que la gente puede llegar a ellos, será la forma en que puedas contactarte: una invitación común, pedir a alguien que te presente o mandarle un InMail (para esto es necesario tener una cuenta paga, no la básica gratuita).
La mayoría queremos incrementar nuestro número de contactos así que no hay mayores inconvenientes, aunque sí te aconsejo que te prepares unas líneas de presentación cuando querés contactarte con gente de los grupos, en realidad siempre que no conozcas a la persona, pues pueden sancionarte si muchas personas contestan que no te conocen (hay un número máximo de invitaciones, una vez que te contestan, podés seguir invitando).
La mejor manera de darte a conocer en LinkedIn, es respondiendo o haciendo preguntas en la sección Respuestas. Por supuesto también se recomienda actuar activamente en los grupos.
Algo diferencial de LinkedIn: las Recomendaciones, característica excelente para recaudar testimonios de colegas y clientes.
Twitter, con su famoso ¿Qué pasa? (What are you doing now?) y los 140 caracteres, copiados tanto por Facebook como por LinkedIn (aunque Facebook permite muchos más caracteres), descolló en 2009. Twitter se trata de gente siguiéndose, te siguen aquellos a los que les interesás por alguna razón y viceversa. El seguimiento no siempre es mutuo. No hay necesidad de conocerse personalmente, a diferencia de Facebook y LinkedIn; aquí cualquiera puede seguir a cualquiera.
Hay gente que protege sus tweets, pero no se me ocurre ninguna buena razón para hacerlo. Lo que hace la mayoría antes de seguir a alguien es ver la cuenta de aquél al que elige seguir, si no sabe qué twiteás, ¿cómo va a saber tu opinión o si comparten intereses?
Estás en Twitter para que la gente te conozca, entonces proteger tus tweets me parece desaprovechar la oportunidad, a no ser que tengas una buena razón, claro. Es una buena plataforma para hacer preguntas, obtener respuestas y promover productos, servicios y eventos.
El lema de las redes que no debemos olvidar es que es más importante dar que recibir, cuanto más des de vos mism@ (información, asistencia, y tan sólo por el placer de ayudar a otro) mayor interés vas a generar vos y tu actividad en los demás.
¿Qué opinás de las redes? ¿Creés que sirven para acercarte a potenciales clientes? ¿Participás de alguna manera en ellas?
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